domingo, 28 de agosto de 2011

"Comisión Nacional Unitaria de Exonerados y Ex presos Políticos de Chile reconviene al Presidente Piñera"

COMISION NACIONAL UNITARIA DE EXONERADOS Y EX PRESOS

POLITICOS DE CHILE


Santiago, 27 de Agosto de 2011.-

AL

SEÑOR

PRESIDENTE DE LA REPUBLICA

DON SEBASTIAN PIÑERA E.

PRESENTE:

Señor Presidente:

En el día de ayer fueron publicadas las listas de detenidos desaparecidos, ejecutados políticos y ex presos políticos y torturados, calificados en una segunda etapa, en conformidad con el artículo 3º de las Normas Transitorias de la ley nº 20.405.

Al revisar estos listados, hemos comprobado con indignación que los criterios usados en los procesos de calificación anteriores referidos a las leyes 19234 y 19992, en esta oportunidad, se vuelven a repetir: se distorsiona gravemente la ley y se califican precisamente a personas que obedecen a un perfil político absolutamente contrario al que definen estas normas, lo que constituye, un procedimiento que atropella absolutamente las mínimas normas de moralidad y ética que deben ser el marco que sustenten estos procedimientos, tomando en consideración el tipo de leyes que se están aplicando cuyo objetivo es, reivindicar la dignidad de seres humanos a los cuales, se les ha dañado gravemente.

Tal procedimiento ya recurrente hoy en nuestro país, constituye un escándalo de relevancia pública, que está siendo investigado en varias instancias institucionales y en el ámbito de la justicia, a través, de denuncias, requerimientos y querellas interpuestas por esta organización defensora de los Derechos Humanos.

La responsabilidad de estos hechos en conformidad a la ley, recae en la comisión calificadora asesora presidencial, que esta señala, la cual, fue nombrada con ocasión de la promulgación de la ley 19992 y posteriormente, ratificada en su composición con motivo de la promulgación de la ley 20405, esto es, desde el año 2004, de esta forma, los criterios en cuanto al perfil de sus integrantes se han mantenido inalterables desde ese año.

Esta situación nos llamó profundamente la atención, ya que con motivo de la referida ley 20405, también, se crea el Instituto Nacional de los Derechos Humanos, institución que en la composición de su consejo cuenta con una persona con dualidad de funciones, nos referimos a la señora María Luisa Sepúlveda E., la cual, además de ser consejera del instituto señalado, es también, Presidenta Ejecutiva subrogante, de la Comisión Calificadora de las leyes 19992 y del llamado Informe Rettig, lo que constituye, a nuestro juicio, una incompatibilidad ética inaceptable.

Estos antecedentes constituyentes de una conducta aberrante por parte del Estado, tomando en consideración del tema que tratan referido a los derechos esenciales del ser humano, fueron puestos en conocimiento suyo, por parte nuestra, con fecha 5 de Abril del presente año, mediante un documento de análisis, el cual, fue acompañado de un set de informes que sustentan nuestro diagnóstico de la situación y la propuesta de solución a este grave problema, los cuales, aún se encuentra sin respuesta por parte de la Presidencia de la República. Hoy el señalado documento de denuncia, diagnóstico y solución, se ve agravado por este proceso de calificación ilegal, puesto en conocimiento de la ciudadanía en el día de ayer.

Esperamos que en esta ocasión, las gravedad de estos hechos, determine al señor Presidente de la República, priorizar una agenda que resuelva definitivamente esta fractura que permanece en nuestra sociedad.

Saluda atentamente.

DIRECCION NACIONAL

Raúl José Celpa López Presidente

Alejandro Morales Chávez Vicepresidente

Nelson Díaz Sánchez Vicepresidente

Domiciano Soto Tejías Secretario General

Jorge Del Campo Balbontin Tesorero

Reinaldo Lagos Rojas Director Técnico

Carolina Vega Miranda Directora

Dirección: Dieciocho Nº 45 Of 301 Santiago – Fono 6962082

Mail: raulcelpa@gmail.com - derechosyhumanos@gmail.com

jueves, 25 de agosto de 2011

Declaración Publica: Comisión Nacional Unitaria de Exonerados y Ex-Presos Politicos

DECLARACIÓN PUBLICA


Chile en 1970 se pronunció mayoritariamente por el tipo de sociedad que quería, después de la noche negra que vivimos y que frustró estos ideales. En 1988, nuevamente en un acto plebiscitario, la sociedad democráticamente, decidió cambiar totalmente el proyecto de la derecha, reemplazándolo por un modelo de sociedad justa, igualitaria y democrática: cuyo centro fuera el ser humano. Lamentablemente, esta decisión democrática de nuestra sociedad, nuevamente fue amagada por acuerdos espurios entre la tiranía, su brazo político y la coalición política que asumió el compromiso de cambio, de esta forma, después de 21 años, la sociedad nuevamente reivindica lo que ha sido su histórica decisión: Crear una sociedad diferente, donde el ser humano sea el eje central, donde el objetivo del desarrollo del país se convierta en calidad de una vida con real sentido.

Con una larga experiencia de trabajo junto al pueblo, y un claro compromiso con la democracia, nuestra organización el año 2000, definía al período iniciado en 1990, como de continuidad, consolidación y culturización del proyecto de la derecha chilena, que la alianza gobernante había traicionado la decisión del pueblo chileno, que la llamada transición no iba jamás a concluir en más democracia. Teníamos razón: la juventud como vanguardia social, hoy, confirma nuestro pronóstico, 20 años de continuidad y al fin, la entrega del poder nuevamente a la derecha, no a una derecha acorralada como la de 1990, sino, una derecha mundialmente poderosa en un mundo globalizado por el capitalismo como proyecto unipolar.

Desde nuestro rol en la sociedad, de defensores de los Derechos Humanos declaramos: que la consigna "Nunca jamás" acuñada demagógicamente por los sectores del poder hace algunos años, es falsa, que no tiene sustento alguno, que si desataron la barbarie con una Constitución hecha a la medida, hoy los mismos hechos criminales se pueden reproducir con la Constitución firmada por Ricardo Lagos, porque en su esencia está la mano del tirano. Chile en su historia, cada vez que ha enfrentado crisis de poder, ha resuelto el conflicto masacrando y reprimiendo al débil, y ese sector ha sido el pueblo. Ahí tenemos a la impunidad institucionalizada, que ha hecho imposible la verdad y la justicia. Este oprobio nacional debe terminar.

Por tanto, declaramos nuestro más profundo apoyo a las propuestas de las vanguardias sociales que hoy emergen desde nuestra juventud, apoyamos con igual fuerza las decisiones de extirpar definitivamente de nuestra lucha, el dogmatismo ideológico y el sectarismo partidario, prácticas funestas que históricamente hicieron fracasar grandes momentos en nuestra historia. Que apoyamos absolutamente las iniciativas que surjan de procesos claramente democráticos, que produzcan definitivamente la unidad del pueblo. Que rechazamos los hegemonismos de sectores que hoy se alzan como críticos de proyectos
que ellos consolidaron y crearon en desmedro de la sociedad.

DIRECCION NACIONAL

COMISIÓN NACIONAL UNITARIA DE EXONERADOS Y EX PRESOS POLITICOS DE CHILE.
derechosihumanos@gmail.com

martes, 23 de agosto de 2011

NUESTRA RESPUESTA A LA MINISTRO DEL TRABAJO

Señora
Ministra del Trabajo y Previsión Social
PRESENTE:

Señora Ministra:

Con asombro y decepción nos hemos impuesto del contenido del ordinario de la referencia, el cual, da respuesta a nuestro requerimiento formulado a usted con fecha 5 de Abril del presente. En el referido ordinario encargado por instrucciones suyas, el Sub Secretario de Previsión Social, aborda alguno de los temas planteados por nosotros, eludiendo temas de fundamental trascendencia como los señalados con respecto a toda la jurisprudencia administrativa emanada desde la Contraloría General de la República contenida en dictámenes que dicen relación con el numeral 1.3.- de nuestra presentación, y que define el criterio de aplicación de la prescripción cuando se ha violado la ley o se han cometido errores de tipo administrativo y que al menos, afecta a siete aspectos de la aplicación de la ley, hoy día, desconocidos por el I.P.S.

Nada dice tampoco el ordinario referido, del grave error en la aplicación del Art. 12 inciso 12 de la ley 19.234, que trata sobre la actualización económica que debe aplicarse a la base de cálculo para pensión, informada por el I.N.E. y que obliga a revisar todo el proceso de concesión de pensiones con cargo a esta ley.

En el numeral 1.4 de nuestro requerimiento, denunciábamos la grave contradicción que existe entre la esencia jurídica de esta ley de reparación, el descuento del 7% para salud y los beneficios contenidos en la ley 19881, llamada Prais. Contradicción que daña gravemente a personas que dice beneficiar, y que proponíamos solucionar mediante la derogación del referido descuento o la creación de la figura jurídica de la opcionalidad entre los sistemas de salud existentes y los de la
referida ley Prais. Desgraciadamente, nuestra opinión no fue escuchada y hoy los beneficiarios de la ley 19234, están excluidos de la derogación del 7% y la referida contradicción continuará perjudicándolos.

Otro aspecto insólito del contenido del mencionado ordinario, es eludir la solución a más de 8.000 personas, a las cuales se les ha desconocido su derecho a percibir el beneficio de la ley 20134, no
obstante, la jurisprudencia que hemos producido a partir de requerimientos formulados a la Contraloría General de la República, eludir esta obligación nos parece una muestra de un abandono de deberes para con las funciones propias de esa institución.

El asombro y decepción a la comentada respuesta entregada por esta Subsecretaría, nos obliga a consultar: ¿Existe voluntad política y administrativa para resolver estos temas?. Esta consulta, es una consecuencia lógica a un largo período donde se cometieron todo tipo de arbitrariedades, atropellos a la ley y a la Constitución, y se cometieron actos de corrupción incalificables, hoy de connotación pública.

Queremos señora Ministra, nos precise si se pretende continuar con los
procedimientos de un pasado vergonzoso.


Saluda atentamente a usted.
Raúl José Celpa López
Presidente

Comisión Nacional Unitaria de Exonerados y ex-Presos Políticos

viernes, 12 de agosto de 2011

LOS DERECHOS HUMANOS INSTRUMENTO DE SOBERANIA POPULAR

LOS DERECHOS HUMANOS INSTRUMENTO DE SOBERANIA POPULAR

I.- Los Derechos Humanos en la historia de Chile

La historia no es solo pasado, sino también, y principalmente, presente y futuro. El mas importante de los Derechos Humanos consiste en respetar la capacidad de los ciudadanos para producir por si mismos la realidad futura. Debatir sobre Derechos Humanos en Chile obligadamente nos lleva a analizar nuestra historia, no la oficial sino la real. La tortura, la muerte, el dolor y la injusticia no se olvidan.

En la historia de nuestro país resulta evidente que por lo menos, desde el siglo XVIII en adelante Chile ofrece ciclos históricos que se asocian a periodos de expansión, crisis y autoritarismo.

La oligarquía fue la que armada intelectualmente del pensamiento conservador mas autoritario y materialmente del monopolio de las armas, gobernó durante todo el siglo XIX y parte importante del XX a sangre y fuego, para reprimir los anhelos de justicia social y libertades políticas que los pobres y los trabajadores reclamaban del Estado, las crisis de gobernabilidad que produjeron estas demandas sociales, significaron masacres de miles de seres humanos.

La primera huelga general en Valparaíso en 1890, significo la muerte de más de cien trabajadores. En 1892 en Iquique, en la salitrera Ramírez muere otro centenar. En Valparaíso en 1903 durante la huelga portuaria, en 1905 en la huelga de la carne en santiago, en Antofagasta en 1906 obreros salitreros son masacrados, en la tristemente celebre Escuela Santa Maria en Iquique en 1907 mueren entre dos mil a cuatro mil personas, la matanza fue tan cruel y masiva que los trabajadores tardaron doce años en intentar un movimiento similar.

Durante 1919 en Puerto Natales, 1920 en Punta Arenas, en 1921 en San Gregorio de Iquique, en 1925 en la Coruña, Ranquil en 1934, Santiago abril de 1957, El Salvador 1966, Puerto Montt 1969, son fechas que testimonian masacres históricas que sufrió nuestro pueblo cuando se atrevió a levantar la bandera de sus derechos.

Frente a la evidencia histórica de estos hechos, el periodo dictatorial que sufrió el país entre 1973 y 1990 son la consagración de un modelo de Estado y una oligarquía, que para sostenerse históricamente, han practicado la violencia cada vez que la gobernabilidad vio peligrar sus bases antidemocráticas, además demuestra la estatura histórico moral de una nación que ha basado su estabilidad en la represión y marginación de parte importante de su población.

En el plano de su historia política, chile es un país atravesado por largos periodos autoritarios (portales, Ibáñez, Pinochet) donde el totalitarismo como ideología de poder gobernó por ejemplo entre 1831 y 1861, etapa caracterizada por l violencia de ello da cuenta la guerra contra la confederación Perú- Boliviana, las guerras civiles de 1851 y 1859, la rebelión de los trabajadores en Valparaíso la insurrección popular en Talca, la rebelión de los mineros en Lota y Coronel, el levantamiento de los araucanos, hechos significativos de periodos de alta violencia de violación al estado de derecho y de situaciones de facto.

En cuanto a los periodos de crisis político-social, Chile por ejemplo durante la etapa que va de 1823 a 1830, muestra lo que va a caracterizarlo como país gobernado por grupos oligárquicos los cuales, en defensa de sus intereses particulares no trepidaron en llevar al país y su población a profundos niveles de crisis, en efecto, durante estos siete años, la crisis se genera al intentar seriamente abolir los mayorazgos, expropiar los bienes de la iglesia católica dar participación política a sectores populares como el artesanado y combatir el centralismo de santiago sobre las provincias.

Desde los origines de la Republica, los derrocamientos, asonadas militares, guerras civiles, guerras expansionistas, crisis institucionales, perfilaron al país como una nación gobernada por las elites oligárquicas y neoligarquicas durante cien años causando al país un daño estructural de difícil solución por la vía democrática.

Así queda demostrado en las crisis prepopulistas de 1851, 1859, 1890, 1891, 1907, 1908, 1924, 1930-32, y las crisis desarrollistas de 1943, 1947, 1955, 1962 y 1967-69.

Los valores de la democracia, el respeto a la vida la libertad del ser humano siempre en la historia de Chile han sido violados cuando los intereses de los grupos de poder son puestos en peligro.

II.- Los Derechos Humanos a partir de 1990, una estrategia política, inmoral

La etapa que se inicia en 1990, esta caracterizada por el pacto o acuerdo, al que llegan la alianza política que asume el gobierno con el gobierno dictatorial saliente (fuerzas armadas, partidos de ultra derecha, y de derecha tradicional) este acuerdo define y sella el carácter que tendrá el periodo de transición en cuanto a mantener el proyecto constitucional impuesto al país en 1980 y el modelo de desarrollo neoliberal también impuesto al país. Nada vale el proceso eleccionario previo a estos acuerdos, evento democrático donde la mayoría vota por un programa político que devuelve al país a la democracia plena modificando estructuralmente las líneas ideológicas que fundaron el proyecto de la Dictadura.

De esta forma por la vía de los acuerdos antidemocráticos de los grupos de poder, traumaticamente se revierte la decisión popular y se impone un modelo de democracia que solo mantiene las formalidades de esta, pero que en definitiva, otorga el poder de decisión soberano a cúpulas políticas y económicas que tutelan la esencia antidemocrática de esta institucionalidad.

De esta manera, en chile no existe una democracia, existe una ficción democrática, donde las mayorías no se expresan ni deciden su presente y futuro, estas son representadas por minorías a las cuales institucionalmente se le otorga el derecho de decisión definitiva. El sistema electoral binominal permite que una minoría política neutralice a las mayorías populares en la representación parlamentaria y a su vez el autoritarismo esencia ideológica de la constitución, otorgue suprapoderes al Presidente de la Republica, anulando la iniciativa de la representatividad parlamentaria.

En definitiva, los chilenos son obligados a votar por representantes previamente elegidos por grupos facticos, lo cual aniquila su capacidad de elección, capacidad que las verdaderas democracias entrega al pueblo. De igual forma, se procede con respecto a la elección de las autoridades de los otros poderes del Estado, una minoría elige la conformación del Poder Judicial y del Poder Contralor de la legalidad del Estado.

Esta institucionalidad violatoria de los derechos esenciales de la persona, ha generado profundos síntomas de frustración y apatía política, que se expresan en la no participación en los procesos electorales, en el ultimo proceso tres de cuatro jóvenes no votaron, tres millones quinientas ochenta mil personas se auto marginaron, la autoridad máxima del país fue elegida con el 35% del potencial electoral de diez millones quinientas veinte mil votantes.

La libertad de expresión, el respeto a la vida, la educación, la salud, el derecho a elección, el derecho a la seguridad social, los derechos a negociar colectivamente, ha sindicalizarse, hoy día no son derechos ciudadanos consagrados en la Constitución, situación que ha excluido a la mayoría del desarrollo humano generando una inequidad escandalosa en el país que lo sitúa entre las tres sociedades mas desiguales del mundo.

El Estado chileno en esta etapa de transición, consolida un sistema político institucional gravemente violatorio de los Derechos Humanos como producto del pacto que subscribiera en 1989 y que determino el destino de la transición, al discurso oficial globalizador se opone la sistemática violación de las normas que constituyen el Derecho Internacional y que obligan al país. Chile, viola hoy parte importante de los convenios que regulan las normas sobre le trabajo y la seguridad social, convenios de la OIT que Chile ha suscrito como el numero 87 y 98 de esta organización sobre sindicalización, negociación colectiva y derecho a huelga. Viola al mismo tiempo, la Convención Contra la Tortura lo que permite hoy, en nuestro país se infrinja daño físico o mental a la persona sin que este delito este tipificado en su gravedad y reciba penas en relación al acto delictual.

En definitiva, la transición a la democracia, periodo que ya se prolonga por diecisiete años, troncho los anhelos de amplias mayorías de ciudadanos que lucharon por una democracia donde sus derechos se vieran representados, el fracaso de estos anhelos mayoritarios definen a esta etapa histórica, como traumática e inmoral. La aseveración: “democracia en la medida de lo posible”, es la expresión de una postura política profundamente inmoral donde los compromisos asumidos con el pueblo, se transan para permitir gobernabilidad con los sectores politicos y económicos que sustentaron e periodo mas negro de la historia político y social de chile, donde se garantizan sus intereses y se consolida su ubicación en la estructura de poder.

En el proceso de gobernar para reestablecer la verdad, la justicia, y la reinserción social, política y económica de miles de chilenos, es donde se manifiesta la gravedad básica del trauma que vive la sociedad chilena. La barbarie que vivió chile entre 1973 y 1990 y que significo que miles de personas fueran asesinadas, miles fueran torturadas, miles hayan sido exiliadas, miles hayan sido expulsados de sus trabajos por las ideas políticas que profesaban, constituye una deuda moral del Estado chileno con el país y el mundo el cual a través de ejemplares muestras de solidaridad has apoyado la demanda de la sociedad chilena.

En el mundo globalizado de hoy, las normas que forman parte del Derecho Internacional y que constituyen el consenso mundial para regular y castigar las violaciones a sus derechos esenciales que sufrieron y sufren los pueblos, constituyen obligaciones ético morales ineludibles y estas forman parte del Derecho Internacional Humanitario y las Normas Internacionales sobre Derechos Humanos, resolución 60-147 de las Naciones Unidas.

En este aspecto, la transición política pactada con los victimarios como lo demostramos anteriormente, hace materialmente imposible el cumplimiento de estas obligaciones internacionales, en sus comienzos la Comisión Rettig establece una verdad “posible” no total, con valor puramente político y sin valor judicial, el objetivo estratégico de la iniciativa es contradecir la imagen de masividad del periodo represivo y acotar los ámbitos de acción del proceso judicial a los responsables ha solo cuatro mil quinientas victimas y no a los cientos de miles que sufrieron estas violaciones, con esto se ha conseguido dejar en la impunidad al alto mando civil y militar creadores del sistema de aniquilamiento y represión.

Una segunda iniciativa enmarcada en esta estrategia para eludir la acción internacional que obliga a Chile, fue promulgar una ley para reinsertar a la sociedad a miles de exiliados que produjo la etapa dictatorial, el objetivo no se cumplió porque nuevamente se viola normativa internacional sobre la materia hoy en el país, los que retornaron son parias económicos perseguidos por incumplir estas normas inhumanas. Pero aquí, con respecto a esta normativa queda de manifiesto el carácter perverso de la política que sobre derechos humanos aplica el Estado, a su sentido inútil, al daño que se le provoca a las personas que retornaron, se suma la defraudación de millones de dólares por parte de los responsables directos de aplicar estas leyes, delitos que están verificados por dos informes investigativos de la Cámara de Diputados en los años 1998 y 2000.

La tercera iniciativa de esta estrategia política, busca reparar y reinsertar socialmente a las personas que perdieron su trabajo por las ideas que profesaban, nuevamente se viola el Derecho Internacional sobre derechos económicos, sociales y reparación. Estas leyes violan además el derecho constitucional de los patrimonios previsionales de las victimas y es promulgada fundamentalmente para que el Estado eluda reiterados fallos de la Corte Suprema que lo condenan por estas exoneraciones arbitrarias. Estas leyes increíblemente, enajenan el patrimonio previsional de la victima para financiar una eventual reparación, el efecto de la norma es realmente precario solo el 40% del total de calificados alcanza a percibir una pensión y esta en un 90% es mínima. Leyes que no favorecen a las victimas, sino al Estado como en el caso de los retornados se actúa con vileza y perversidad, al instrumentalizar estas normas para obtener beneficios electorales cautivando durante años a cientos de miles de personas con la promesa de ser calificados como exonerados politicos por parte del Estado y sus agentes.

Una cuarta iniciativa es promulgada después de trece años de ejercicio del poder por parte de la coalición gobernante, y esto es solo posible por la presión internacional, el cuestionamiento que el país formulan organizaciones de Derechos Humanos y definitivamente con la instrumentalizacion electoral que se pretende perpetrar con la iniciativa. Ella busca reparar a las victimas de prisión política y tortura y al analizar u texto queda de manifiesto el objetivo de la misma: en primer lugar, consolidar por mandato de la ley la impunidad de los victimarios de tortura y prisión política; en segundo lugar declarar incompatibles los derechos a ser reparados cuando una persona a sido victima de otras violaciones; en tercer lugar, viola el principio de proporcionalidad entre el carácter del acto violatorio y la reparación, al fijar un solo tipo de reparación fijando a esta un monto irrisorio que alcanza los doscientos dólares mensuales, consecuentemente con el resto de la normativa antes descrita también en esta ocasión se viola flagrantemente el Derecho Internacional.

De todo lo anterior, debemos concluir que Chile ha sido desde su inicio como republica un Estado profundamente violador de los derechos de las personas en el ámbito de lo civil, político y económico. Los derechos del individuo, ciudadano de la Republica, son letra muerta cuando se anteponen a los intereses de minorías que ostentan el poder, que la institucionalidad que rige la convivencia social no surge del anhelo de las mayorías muy por el contrario, la historia demuestra que esta es y ha sido el reflejo de los intereses de minorías oligárquicas y neoligarquicas como ocurre hoy día. Que Chile no es un país democrático sino que vive una ficción democrática que frustra y aliena a la mayoría de los ciudadanos alejándolos de su rol democrático de constructores de su presente y su futuro.

La soberanía emana de la libertad personal y colectiva, y los derechos humanos constituyen la consagración jurídica universal de esa dignidad soberana, la constitución y las leyes en tanto expresan la voluntad soberana de la voluntad nacional, son legítimas. Si, y solo si la expresan, se puede afirmar que representan soberanía.

Referencias Bibliograficas:

  • “Manifiesto de Historiadores”, Gabriel Salazar y otros.
  • “Historia de Chile”, Luis Vitale.

Autor: Raúl Celpa L.

jueves, 11 de agosto de 2011

EN BUSCA DEL TIEMPO PERDIDO (primera parte)

En busca del tiempo perdido (primera parte)

Hemos querido titular pomposamente con el nombre de la trascedente obra de Proust, este proyecto de análisis histórico de los últimos 47 años de la vida de nuestra sociedad: las decisiones que le ha tocado asumir, los hechos que ellas provocaron en nuestro pasado reciente, las que originan en la actual crisis que enfrentan los chilenos, el tiempo que estamos obligados a recobrar pues lo perdido se expresa en vidas de seres humanos, muchas de ellas, ya perdidas, pero la mayoría al menos tres generaciones con el deber de asumir el liderazgo de un proceso que les devuelva su condición de soberanía y dignidad humana.

Una ola de indignación recorre el mundo. En los últimos 40 años, la sociedad mundial ha sido conmovida por el colapso de sus dos principales proyectos de vida, lo cual, destruyó las esperanzas construidas durante siglos. Desde la Revolución Francesa, caen los dos grandes sistemas ideológicos que se empiezan a perfilar a partir de este suceso político social ocurrido a finales del siglo 18: En primer lugar, el Socialismo en 1990, culmina en una crisis terminal, como consecuencia de una forma errónea de implementación y las contradicciones que produjo la manera de concebirlo. En segundo lugar, el Capitalismo el cual, al hegemonizar al mundo muestra su rostro más inhumano, llevando en estos últimos 21 años a la humanidad a cumplir un rol indigno, al negarles su esencia.

Grandes procesos sociales y políticos como la descolonización, la independencia nacional, los movimientos de liberación nacional, la emancipación del hombre de la esclavitud, el término de las fobias inter-raciales, logros que surgen de grandes luchas que dá la humanidad con costos de millones de vidas y que muestran el desarrollo de un profundo proceso evolutivo del hombre, hoy en riesgo, por la unipolaridad de una ideología que extrema al pragmatismo de lo material sobre lo humano como unica forma de concebir la realidad.

Nada en este ciclo evolutivo de desarrollo humano, hoy en riesgo, le fue regalado a la humanidad: Dos grandes guerras mundiales, guerras de independencia nacional, guerras de posicionamiento geográfico como consecuencia de un largo proceso de guerra fría entre las dos potencias que hegemonizan la conquista del mundo, hoy día forman parte de experiencias fracasadas que destruyeron las grandes esperanzas e ideales de millones de personas. Es así como, un futuro incierto invade al Hombre contemporáneo, hoy sin proyecto de desarrollo alternativo producto de una crisis permanente en la cual ha entrado el proyecto capitalista de desarrollo, la modernidad centrada en el desarrollo meramente tecnológico, postergó definitivamente el desarrollo de lo humano, obligándonos nostálgicamente a involucionar y pensar en etapas ya pasadas como la Ilustración, una total carencia de pensamiento de vanguardia simboliza el período crítico por el cual atravesamos.

De esta forma, viejas tiranías del mundo musulmán, son derribadas por pueblos enajenados durante siglos por el influjo religioso y después por las fronteras ideológicas de un socialismo que nunca llegó. Europa entra en un proceso de movilización social, bajo las banderas de la indignación, provocada por una crisis que cada día se agrava sin esperanzas de ser superada.

El lanzamiento del manifiesto “INDIGNAOS” (indignes vous), del filosofo Stéphane Hessel, reevíndica los principios que inspiraron la creación de las democracias modernas europeas, hoy en crisis, y sirve de sustento filosófico político al proceso de levantamiento social de indignación ante este estado de la humanidad.

Nuestro país, claramente en su historia nos muestra como el proceso de desarrollo evolutivo se va perfilando en sentido de lo humano como eje central: Una democracia cada vez más inclusiva, un estado protector, una política educacional centrada en lo plural, construcción de una legislación que en lo social tendía a proteger al más vulnerable, como consecuencia de cada vez mayores niveles de participación social y política en la toma de decisiones. En 1964, democráticamente es elegido un proyecto político de desarrollo llamado “Revolución en libertad” el cual, abre el debate sobre temas como la chilenización del cobre y la entrega de tierras a nuestros campesinos, introduce una fundamental modificación a la estructura capitalista de desarrollo primitiva que tenía Chile.

Este proceso, más el contexto mundial de hechos provocados por la decisión de pueblos como el cubano en 1959; el vietnamita que tras una larga guerra, primero contra los franceses y después contra los EEUU, logran su independencia. Además el caso francés, que en l968, pone en jaque al gobierno, tras una rebelión de los estudiantes universitarios que junto a los obreros provocan una modificación radical en las relaciones de poder en ese país y que posteriormente se extendió a toda Europa, aceleraron el desarrollo evolutivo importantemente al ser el marco de referencia contextual en nuestro país.

El discurso de nuestro país, estaba a nivel de las sociedades más avanzadas en lo político, en lo cultural, participábamos de los temas que eran de interés del mundo, baste decir como ejemplo, que simultáneamente se estrenaban obras de teatro en Santiago y Nueva York, como Equs por la compañía de teatro de los 4, de los hermanos Divauchelle. Gran nivel de participación democrática y mas acceso a la cultura de grandes masas sociales en el desarrollo de Chile, lo cual, permite la optimización la construcción de mejores niveles de democracia, que significan darle peso sustentable en el tiempo a nuestras decisiones electorales futuras.

Asi, llegamos a 1970, con altos niveles de conciencia en lo político y lo cultural, para enfrentar un proceso electoral que sería el más importante de nuestra historia republicana, pues en él la sociedad chilena asumiría un rol de sujeto social y político en la construcción de dos de las tres propuestas programáticas que el mundo político le haría al país.

Lo trascedente del evento electoral era la confrontación de los dos grandes y únicos proyectos de desarrollo que imperaban en el mundo en ese entonces, un mundo bipolar con claras fronteras en lo geopolítico e ideológico, sustentadas por un permanente sistema de confrontación y defensa de estas fronteras llamado “guerra fría”.

Ante este contexto mundial el país estaba preparado, un intenso proceso de lucha ideológica iniciado en l964, más un importante cambio en las relaciones de producción y de poder en muchas areas de nuestra estructura económica: el cobre; las relaciones agrarias de producción; la creación de una burguesía nacional, como efecto de un insipiente proceso de industrialización generado por los tratados de integración Latinoamericana, habían generado en el país una dinámica de cambio que auguraban mejores tiempos para Chile.


Raul Celpa Lopez

Presidente

Comisión Nacional Unitaria de Exonerados y Ex-Presos Politicos